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El otro día leyendo la letra de una canción que Wan Xiaoli cantaba a su mujer descubrí un carácter que no conocía: 霞. Se pronuncia xiá, y suena como xià, 夏el verano. Está compuesto arriba por el radical de lluvia 雨, yu y abajo por jia, la forma antigua de la actual 假 jia, que en el segundo tono puede significar falso, artificial y engañoso, prestado, y en el tercer tono, vacaciones. El cararcter 假 jia proviene del dibujo del número dos 二 y la piel 皮, dando la idea de doble piel. Lógicamente 雨yu es su radical semántico y 假 jia es el radical fonético, que con el tiempo ha ido transformándose en xiá.
El significado de 霞 xiá es precioso: en español existe una palabra, arrebol, que designa las nubes rosadas o púrpuras de la puesta de sol, el crepúsculo. Me gustaba la idea de que existiera un carácter para hablar de ese efecto incorpóreo de una luz y un color que se producen en un determinado momento del día y que se relacionase con esa segunda piel y con el agua de la lluvia, que queda desmentida. Como en el pensamiento freudiano en el que es porque el objeto está ausente, perdido, por lo que cuenta. En el que el objeto ha sido reprimido, expulsado de la imagen, pero es justamente por eso por lo que regresa. Para decir una cosa no la decimos directamente, damos una vuelta, dibujamos otra cosa. Me gusta que en la propia escritura aparezca la idea de semblante, artificio, de una cierta ficción, y que a todo eso alguien haya necesitado darle una forma y ponerle un nombre.
Hoy continuaba leyendo a Rainier Lanselle, en un momento dado hablaba sobre sobre uno de los calígrafos más conocidos de la antigüedad china, Wang Xizhi 王羲之 , al que le gustaba repetir que lo esencial de su arte lo había aprendido observando a las ocas volar. En la tradición poética cuando los gansos u ocas vuelan se dice que dibujan caracteres chinos en el cielo. Cuando el calígrafo escribe el carácter de oca, 鹅, que se pronuncia e, compuesto por el radical de pájaro, 鸟niao y por 我 wo, que significa yo, como elemento fonético, no podrá buscar una semejanza formal o exterior de lo que representa, puesto que gráficamente no tiene nada que ver, pero deberá encontrar por debajo de esas apariencias algo que se desprenda de la escritura y conecte con la realidad de la cosa. La semejanza con la cosa que se representa no ha de ser exterior o formal, y justamente ahí reside el secreto del trazo del calígrafo y, potser, de toda escritura.
june swoon
Hace 10 años
9 comentarios:
Precioso pero increíblemente difícil me parece el chino. Así pues xiá son las nubes rosadas del crepúsculo, ¿o es la misma luz del crepúsculo?
Casi cualquier cosa es maravillosa, si se ilumina con esa luz.
ayer,después de colgar la estrella de la semana -una obligación a la que me ató la pequeña Vanessa, ilusionada con esta propuesta- volví a encontrar el texto entre mis borradores.
Quelle merveille! Cuando te escucho o te leo esas revelaciones sobre la escritura china pienso que si la ironía de Cervantes ha transformado el espíritu zafio de los españoles y les ha dado al menos esa capacidad de burla, ¿cómo una escritura así no iba a hacer más sutiles a todos los chinos en general? Así que voy a la tienda de frutas chinas y los miro con secreta admiración.
En cuanto a los trazos en el cielo, la caligrafía, el secreto de la escritura, el hilo que une la mano a la mente y la frase que se teje en esa conexión, estaba yo empezando a escribir sobre eso esta mañana, y si puedo lo acabaré. Pero qué ocas, mamma mia! He visitado la página flickr del fotógrafo y he visto un escuadrón de ocas negras como trazos de tinta en el cielo, oui, madame V...
También pienso en el molde hueco, o en el fósil que es lo que rellena ese hueco, ese objeto perdido, enterrado, que vuelve, como justamente hablaba yo en mi post de hoy, esa ética (y maternidad también) construida con el negativo de mi infancia, con lo que me faltaba entonces.
uy! llego tarde de una cena con Anne-Hélène! (la traductora de Li Bai y los poetas chinos!) medio ebria de vino tinto y cava (!!) qué alegría encontrarme con vuestras visitas, mañana os contesto con más esmero...chez vous, si puedo
xiá es la traducción de arrebol, que son las nubes rojizas del crepúsculo, Frikosal, y qué bonita tu conexion con ese molde en negativo de la falta, incluso en la maternidad, wise cousin, me alegro que el vuelo de las ocas resonara en ti!
orgullosa estoy de haber contribuido en algo en ese espacio semanal necesario y "oxigenario2 en el que poder respirar, don Cacho
bona nit Li Bainesa
Y ese post? No venía?
Qué deleite es este blog..
y ni siquiera conocía la palabra arrebol en castellano...
Puedo hacerte una pregunta? Cuándo y cómo aprendiste Chino? Me percato del placer que debe producir aprender una lengua que tiene tantas sutilezas...pero estoy de acuerdo con Frikosal: debe ser increiblemente dificil.
Cómo te va en Paris?
Muy bello, creo que a cualquiera le puedes despertar el gusto de aprender chino...
Gracias por la belleza expresada
Muchas gracias por la amable visita,
no he conseguido entrar en tu blog, pero me alegran tus palabras
sí, el chino es una aventura fascinante
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